ValiantES 130 | Bloodshot: Rising Spirit #1-4
ValiantES 130 | Bloodshot: Rising Spirit #1-4
ESCRIBE: Kevin Grevioux DIBUJA: Ken Lashley/varios
Luego del final de BLOODSHOT: SALVATION y el misterioso futuro status quo del personaje en HARBINGER WARS 2, Valiant regresa al personaje a sus orígenes secretos con BLOODSHOT: RISING SPIRIT.
A estas alturas, la película del mercenario estaba en producción y probablemente a esto se deba el deseo de volver a explorar la relación entre el personaje y el laboratorio que lo creó, quizás para generar más material utilizable en la saga de cine.
Así que ¿qué tal estuvo este tomo?
La historia, un tanto como el rompecabezas mismo que es la memoria de Bloodshot, nos presenta versiones contradictorias y confusas de su origen: al parecer el origen del personaje se da en 2010, cuando el mafioso presidiario Angelo Mortalli (referencia al Bloodshot original de los 90’s) es elegido por el representante de RSP, Gavin Cormac, para el experimento con los nanites.
De ahí observamos varios saltos y retornos en el tiempo, en que se nos presenta a Bloodshot como compañero de escuadrón del “Team Spirit”, compuesto por Burt, Pearson, Chester y Amber, nuevos personajes de los cuales solo tenemos un pequeño atisbo, para de inmediato revelarnos que -tal vez sí o tal vez no- todo fue un recuerdo simulado.
El #3 nos da atisbos de explorar la mitología del proyecto Bloodshot, y aunque curiosos, estos son demasiado breves, mostrándonos entre otros al proyecto “Resurrected Soul” de Boston en 1895, primer paso del “proto-Bloodshot”, y un Bloodshot creado en 1898 para apoyar la Revolución cubana. Ojalá hubiéramos tenido más al respecto.
Una pena que todo termine en un cliffhanger, luego de varios “inicios en falso” repetitivos que solo logran confundir al lector. Cabe mencionar que este corte es “artficial”, en realidad la saga nunca se recolectó en TPB (cosa que no habla muy bien de su calidad) pero hemos decidido reseñar este ongoing de 8 números revisando mitad por mitad.
Y retomando el problema de la calidad, esta va disminuyendo conforme avanzan los números, especialmente el dibujo, que para el #3 ya cuenta con un coloreado demasiado sencillo, mientras que el #4 corre a cargo de Harvey Tolibao e Isaac Goodhart, el primero con un trazo verdaderamente horrible (pero buen coloreado), y el segundo con una calidad apenas decente en ambos apartados.
Este cómic fue producido justo después de la venta de Valiant al conglomerado DMG, y se nota los problemas que tuvieron para adaptarse a la nueva administración. Ya veremos más adelante si la segunda mitad de este fallido proyecto tuvo más aspectos redimibles.
- HeroVox
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